< blog

ACABA CON EL EGO INCONSCIENTE

14-12-2017

Cuántas veces te ha dicho el coach: “baja el peso en la barra”, “cógete una goma más gruesa”, “ponte otro disco debajo del ABMAT”, “marca bien el movimiento”, entre otras muchas cosas…

 

¿Duele? ¿molesta? ¿hiere tus sentimientos? Es muy probable sentir algo así, pero tienes que tener en cuenta que lo que busca el coach es mejorar tus movimientos.  Él te ayuda a que seas consciente de tus límites para que, con el tiempo, tu rendimiento deportivo mejore, él busca hacerte mejor atleta sin que te hagas daño.

 

En muchas ocasiones me he encontrado con clientes que se ponen más peso porque sino les parece que no están entrenando lo suficiente y con ello lo único que consiguen es no hacer bien las repeticiones. Infinidad de veces he visto no acabar de hacer las repeticiones en medio del Wod para seguir a su compañero y ganarlo, incluso no hacer la cantidad de repeticiones que toca para así conseguir mejor resultado. Otras veces saben que necesitan una goma más gruesa, pero por vergüenza no la cogen y llegan al «target» para contar ese ejercicio… Y así, suma y sigue.

 

Lo único que se consigue con todo lo explicado en el párrafo anterior es: NO EVOLUCIONAR.

 

Hay personas que son conscientes de lo que hacen, pero otras muchas no lo son. A eso lo llamo yo el “ego involuntario”.  Para solucionarlo hay 5 puntos básicos con el que conseguirás agarrarte más a la humildad y podrás dejar el ego en la puerta:

1. Olvídate de lo que hacen los demás: no mires alrededor, cada persona es un mundo y tienes que centrarte en ti y en tu evolución.

2. Abre tu mente: aunque a veces te moleste ver que eres el único que estas haciendo OHS con la barra vacía, piensa que entrenando de forma inteligente conseguirás que esos OHS algún día sean con 60kg.

3. Escucha a tu coach: quiere lo mejor para ti, que no te hagas daño y evoluciones.

4. Haz los deberes y sigue una buena progresión: todo ello es para conseguir unos movimientos impecables.

5. Ten paciencia: con el tiempo conseguirás el tan deseado RX.

Se acerca el 2018… ¿Por qué no hacerlo como propósito de año nuevo? ¡SUERTE!